Las últimas horas fueron convulsionadas para Carlos Guillén. En la tarde del lunes, un parte médico lo obligó a sopesar la decisión de retirarse y ayer en horas de la mañana decidió colgar los spikes y ponerle coto de esa manera a una carrera de 14 campañas en Grandes Ligas.
“Es una decisión difícil, pero en la vida hay que tomar decisiones. Traté de regresar y, lamentablemente, no se pudo, pero son cosas por las que todo pelotero va a pasar y nadie está preparado para esto”, expresó Guillén al otro lado de la línea telefónica. “Ayer tomé la decisión porque tuve que hacerme una resonancia en la pantorrilla derecha y no estaba al cien por ciento”, agregó el maracayero sobre el último impulso que lo condujo a tomar la determinación.
Apenas habían transcurrido horas y, antes de hablar con los medios, Carlos decidió comunicarle la decisión a su familia y a Magglio Ordóñez, compañero de batalla en Detroit, donde vivió sus mejores años.
“Hablé con Magglio, quien me brindó su apoyo, es un pelotero admirable para mí, porque ha jugado muchos años y pude contar con su apoyo. Esto es algo verdaderamente difícil”, dijo el toletero con la voz entrecortada.
Guillén tuvo una carrera minada por las lesiones, algo que se agravó en los últimos años; sin embargo, entre 2004 y 2008, cuando tuvo sus picos ofensivos más altos, fue el segundo en .OPS (porcentaje de embasado más slugging) entre los campocortos (.870). ¿Hasta dónde hubiera llegado su carrera de no haberse lesionado tanto? “No sabría decir, porque las lesiones siempre estuvieron ahí, pero siempre tuve la cabeza en alto, enfocado en salir de todas las situaciones malas por las que pasas”.
Cuando hace un balance de lo que fue su carrera, el nativo dice sentirse satisfecho y cree que todavía le queda mucho por enseñar en el beisbol. “Fue una carrera exitosa, con altibajos, pero en la que salí adelante con el apoyo de mi familia. Desde las tribunas no saben por las adversidades por las que pasa uno. Yo disfrutaba todos mis momentos, todos esos sacrificios. Ahora quiero, a través de mi academia, ayudar a los muchachos a que no pasen algunas de las dificultades por las que pasé yo. También quiero aprovechar este tiempo para echarles agua a los hijos, para verlos crecer, que es lo que uno les deja. Después de eso, ya veremos”, cerró.
Quiere irse con un título con el Magallanes
Carlos Guillén anunció su retiro de los diamantes en Estados Unidos, pero aún cree que le falta su despedida de Venezuela con el uniforme de los Navegantes del Magallanes.
“Yo quiero jugar con los Navegantes del Magallanes este año. La última vez que me uniformé con ellos (en la final de la 2009-2010) estuvimos muy cerca de llevarnos el campeonato. Quiero que en Venezuela sea con broche de oro, con un campeonato para el Magallanes”, apuntó Guillén. “Durante este tiempo que estaré libre, trataré de prepararme para eso”, agregó.
Guillén tiene proyectos como el rescatar la Asociación de Peloteros de Venezuela, aunque de momento quiere pensar las cosas bien. “Todos saben que tenemos una Asociación que no nos representa; sin embargo, me acabo de retirar y quiero pensar bien las cosas; por lo pronto, solo seguiré trabajando con mi academia y viendo crecer a mis hijos”.
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