Los tipos de cáncer más
comunes entre la
población infantil, por orden de frecuencia, son: leucemia, tumores del
sistema
nervioso central (cabeza), linfomas, sarcomas y osteosarcomas.
Así se
desprende de las estadísticas manejadas por el Oncológico Virgen del
Valle
situado en el municipio Heres del estado Bolívar, cuyo pediatra adjunto
a
Oncología Infantil, Gustavo Lanz, afirmó que el cáncer infantil ha ido
ganando
terreno en el mundo entero y que la leucemia es la modalidad más
frecuente
entre los niños bolivarenses.
Explicó
que esta enfermedad consiste en tumoraciones que afectan los glóbulos
blancos,
lo que causa un aumento anormal de éstos y por tanto daños a la médula
ósea.
Por su parte, los linfomas afectan al sistema linfático y pueden
proliferar en
cualquier parte del cuerpo, sobre todo en el abdomen al tratarse de
niños.
Los
sarcomas son tumores en el tejido conectivo (tendones, cartílagos,
grasa,
músculos, vasos
sanguíneos);
mientras
que
los osteosarcomas se reproducen en los huesos, generalmente en
adolescentes
mayores de 10 años.
El pasado
15 de febrero se conmemoró el Día Internacional de la Lucha Contra el
Cáncer Infantil, por lo que Lanz aseveró que la mejor forma de prevenir
esta
enfermedad es llevar una alimentación saludable, evitar exceso de
radiaciones,
llevar un control médico (en este caso pediátrico) y vigilancia
oncológica en
pacientes cuyos familiares directos presenten o hayan sufrido cáncer.
Respecto a
las comidas, existen ingredientes de riesgo presentes en enlatados,
embutidos,
colorantes y refrescos, por lo cual el doctor exhortó a evitar su
consumo. La
exposición frecuente a humo contaminante, químicos o cigarrillo también
representa un riesgo para los más pequeños de la casa.
Cómo se genera
A pesar de
que no existen causas conocidas exactas que generen el cáncer, se ha
comprobado
que quien lo padece tiene una mutación en sus células o ADN.
Igualmente, muchos
pacientes poseen la enfermedad en sus genes y puede activarse a
cualquier edad.
La
existencia defectuosa del gen p53 o supresor tumoral en el organismo
también
permite que células anormales proliferen sin control, lo que da como
resultado
el cáncer.
Lanz
afirmó que no se trata de una enfermedad hereditaria y que la
recuperación
depende del cumplimiento íntegro del tratamiento, en las fases y
cantidad
indicada por el especialista, bien sea quimioterapia, radioterapia o
ambas
inclusive.
Cuando un
niño presenta síntomas se le practican estudios, una vez diagnosticado
como
cáncer se hace la biopsia, luego la histología del tumor para
determinar su
tipo, así como la prueba inmunohistoquímica (para identificar moléculas específicas en
diferentes clases de tejido). Finalmente se
inicia quimioterapia o radioterapia, cuya
cantidad depende del tipo de tumor, y a medida que avance el
tratamiento se
revalora al paciente.
Las recaídas
más frecuentes se producen en pequeños que poseen leucemia o tumores en
el
sistema nervioso central. Esto se da, explicó el galeno, porque el gen
aún se
encuentra activo y por lo general la enfermedad se repite más agresiva.
En el
Oncológico Virgen del Valle son atendidos gratuitamente un aproximado
de 14
infantes a diario, entre consultas por primera vez y seguimientos. Las
consultas psiquiátricas y de nutrición son importantes para apoyar a
los
pequeños y sus representantes, quienes deben entender y aceptar el
proceso que
en adelante llevarán.
Otras
especialidades brindadas son cirugía general, proctología, mastología,
traumatología, oncología, terapia del dolor, medicina interna,
psiquiatría,
quimioterapia y laboratorio.
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